Muchas gracias a todos por vuestra acogida tan amable y por las palabras cariñosas que me habéis dedicado. Gracias por invitarme y por dejar que os acompañe en un día tan importante.
Hoy estamos en Salamanca, una ciudad abierta y solidaria que también es un referente en la investigación contra el cáncer. A sus autoridades, a sus ciudadanos, gracias también por su cariño.
La Asociación Española Contra el Cáncer de nuevo nos convoca para entregar las ayudas a la investigación oncológica. Y lo hace, como cada año, después de 56 de trabajo y con más de 700 profesionales que siguen aunando su esfuerzo para mejorar la vida de los enfermos de cáncer y de sus familias. Junto a ellos, 14.000 mil voluntarios y 110.000 socios.
Todas estas cifras avalan el compromiso continuado y recién renovado de la asociación en la lucha contra el cáncer, aunque quizá no son los números los que mejor describen la labor de esta asociación. Puedo citar también algunos verbos: informar, concienciar, apoyar y acompañar, movilizar e influir. Dar esperanza también. Y, por supuesto, financiar la investigación oncológica.
"...Sus miles de voluntarios, profesionales y socios han sabido acercarse a los pacientes y a sus familias. Esa cercanía, a la vez experta y llena de humanidad, ha devuelto a muchos enfermos la esperanza, la moral de victoria y la voluntad de lucha, con el respaldo de la alta calidad de la oncología y del personal sanitario en España...."
Así que enhorabuena a todos los investigadores que hoy reciben las ayudas de la Asociación Española Contra el Cáncer. Vuestro excelente trabajo y vuestro esfuerzo se merecen nuestro reconocimiento y el de toda la sociedad española por esa búsqueda continua de soluciones.
Además hoy reconocemos a la compañía de consultoría Accenture, al Diputado Josep Antoni Durán i Lleida y al Profesor Ciril Rozman su labor comprometida y su dedicación en la tarea de vencer al cáncer. Son los tres premiados con los galardones?V de Vida?. Nuestro homenaje para ellos simbolizado en la escultura de Martín Chirino.
Antes he hablado de los voluntarios y de los socios. Y quiero volver a ellos para agradecerles su trabajo permanente y desinteresado. Esta suma de energías es clave para seguir avanzando por el camino difícil que supone plantarle cara al cáncer. Lo sabemos todos los que lo hemos visto en personas queridas. Y somos muchos. Por eso es tan importante la colaboración de todos los sectores que ha conseguido pilotar la Asociación Española Contra el Cáncer.
Al mismo tiempo, y sobre todo, la asociación ha luchado directamente contra este mal. Ha reunido medios y ha orientado ilusiones para estimular la I+D+i en España, al servicio de la oncología al nivel más alto.
Pero suéxito va mucho más allá. Sus miles de voluntarios, profesionales y socios han sabido acercarse a los pacientes y a sus familias. Esa cercanía, a la vez experta y llena de humanidad, ha devuelto a muchos enfermos la esperanza, la moral de victoria y la voluntad de lucha, con el respaldo de la alta calidad de la oncología y del personal sanitario en España.
Vuestro empeño, que moviliza las mejores virtudes de nuestra sociedad en bien de todos, especialmente de los más vulnerables, nos hace más solidarios y mejores.
Una vez más, mi enhorabuena sincera por esa espléndida labor y muchas gracias por vuestra invitación.