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n nombre de la Princesa y en el mío permitidme que agradezca a la Confederación Española de Asociaciones de Jóvenes Empresarios su amable invitación para presidir esta celebración. Sinceramente, nos alegra mucho compartir con vosotros el XXV aniversario de una iniciativa pionera que dio lugar al importante movimiento asociativo articulado por C.E.A.J.E., la creación de Asociación de Jóvenes Empresarios en Madrid.
Por tanto, a todos los que pilotaron y apoyaron su arranque, lleno de dificultades, a todos los que se desvivieron por su andadura contagiando con su espíritu y ejemplo otras iniciativas por toda España, nuestra enhorabuena de corazón por este primer cuarto de siglo. Un tiempo en el que habéis sido protagonistas de una historia deéxito, tanto para vuestro bien, como para el del empresariado y para el de la sociedad en su conjunto. Así que podéis mirar atrás a estos cinco lustros y sentiros muy satisfechos.
Especialmente por tres motivos: por vuestro trabajo bien hecho, por el reconocimiento internacional que habéis logrado para la Confederación, y por lograr un avance muy sustancial en la promoción del espíritu emprendedor, al que os dedicáis con gran esfuerzo y convicción. Treséxitos que seguramente os permiten afrontar con mayor confianza los retos y desafíos del día a día que plantea el momento tan complejo que vive la economía.
Quisiera ahondar un poco más sobre estos tres aspectos: En primer lugar, como os decía, la calidad de vuestra tarea profesional. En efecto, las Asociaciones de Jóvenes Empresarios han sabido intensificar la actividad de nuestro tejido empresarial y aportarle densidad, estimulando el nacimiento de nuevas firmas. Vuestras empresas -entre las que se incluyen tantas medianas y pequeñas-, son una de las claves determinantes de la inversión y del empleo en España.
Al mismo tiempo, las Asociaciones incluidas en esta Confederación han fomentado la competitividad, alentando la cooperación y el aprendizaje mutuo, elementos idóneos para favorecer el aumento de la productividad, el crecimiento sostenible y la flexibilidad que permite satisfacer los cambios de la demanda. Sólo este punto avalaría por si mismo el conjunto de vuestra actividad.
En segundo lugar, durante estos 25 años los jóvenes empresarios habéis demostrado imaginación y conocimiento del mercado; con esfuerzo y valor habéis asumido riesgos; y además, os habéis conducido con responsabilidad y competencia para el trabajo en equipo. De este modo -y gracias al aumento de la calidad y la competitividad de los bienes y servicios que ofrecéis- habéis apoyado a vuestras firmas para alcanzar posiciones de liderazgo en su sector. No se trata de una percepción nacional más o menos acertada, sino de un conjunto de apreciaciones compartidas por empresas y personalidades de países muy distintos.
De hecho, miembros de vuestra Confederación presiden la Federación Iberoamericana de Jóvenes Empresarios. Del mismo modo, uno de vuestros Vicepresidentes acaba de ser elegido Presidente de la organización europea "Yes For Europe" con más de 40.000 integrantes. Ambas entidades, de distintos continentes, han reconocido vuestra integridad y valentía, al tiempo que el empeño decidido y el duro esfuerzo de los que habéis dado buena prueba, movidos siempre por vuestra ilusión y capacidad de superación. Todo esto os debe llenar de orgullo. El mismo orgullo que nos hacéis sentir a todos.
Enhorabuena, porque vuestra presencia activa en ambas entidades reforzará la cooperación internacional de nuestras empresas e incrementará las oportunidades de negocio de sus miembros, aumentando vuestras posibilidades de generar riqueza y empleo, y mejorando la representatividad de nuestros jóvenes emprendedores que requieren un mayor respaldo a la hora de salir al exterior.
En tercer lugar, es evidente que nos ha tocado vivir una de las crisis económicas más graves por las que ha atravesado el mundo contemporáneo. Nuestras empresas se enfrentan a una serie de retos que deben afrontar con decisión. La pérdida de competitividad en algunos sectores y los problemas adicionales de muy distinta envergadura convergen en la más seria y dolorosa de sus consecuencias, la pérdida de empleos y el aumento del Paro. Un grave problema que hemos de frenar y sanar, dedicándole nuestro mejor empeño y nuestra mayor solidaridad.
Desde vuestro origen he seguido y respaldado el espíritu emprendedor que CEAJE inspira. Precisamente, el Premio Joven Empresario, que he tenido la alegría de entregar en distintas Ediciones, galardona a quienes han consolidado ejemplarmente tanto el desarrollo de su negocio como la creación de empleo y la creación de riqueza en su entorno.
Y hoy, señoras y señores, aunque estemos celebrando este importante aniversario, no quiero terminar sin incidir nuevamente en un aspecto crucial y decisivo para nosotros ante la difícil coyuntura económica; se trata de nuestra capacidad de innovación, que hemos de intensificar mucho más, tanto para no perder más competitividad, como para mejorarla una vez veamos que se afianza la recuperación de nuestra economía.
La transformación de ideas y progresos científicos en realidades productivas desbloquea la creación adicional de empleo y es cada día más imprescindible en los mercados globalizados. Precisamente, querría encomendar a los jóvenes empresarios el impulso a la innovación en las empresas españolas, como un objetivo propio, específico e ilusionado.
España y su economía cuentan con vuestra positiva influencia, síntesis de imaginación, tenacidad y visión de futuro, como lo demuestra vuestra trayectoria de estos 25 años. Con vuestra voluntad y talento, estoy seguro de que sabréis modernizar permanentemente vuestra manera de emprender, para aseguraros el porvenir y seguir contribuyendo, como hasta ahora, a la prosperidad económica y el bienestar social de nuestra Nación.
A todos, enhorabuena de nuevo, y muchas gracias.