E
sta mañana se ha producido un atentado terrorista con coche bomba en la Universidad de Navarra causando múltiples heridos.
Déjenme, por ello, que empiece estas palabras expresando desde El Salvador mi más firme condena y repulsa frente a dicho acto terrorista, y manifestando todo mi afecto y mejores deseos de recuperación a los heridos.
Señor Presidente de la República de El Salvador,
Señoras y Señores Jefes de Estado y de Gobierno,
Señor Secretario General Iberoamericano,
Señoras y Señores,
De los jóvenes depende, sin duda, el futuro. Parafraseando al pensador salvadoreño Alberto Masferrer, en el joven ?cabe el mejoramiento visible y trascendente de la sociedad; sólo en él alcanzan su realización las esperanzas y los anhelos de acrisolamiento?.
Por ello, una de nuestras obligaciones prioritarias es crear las condiciones adecuadas en cada uno de nuestros países para que la juventud iberoamericana pueda desarrollar plenamente sus potencialidades, atendiendo sus necesidades e inquietudes, promoviendo su más completa formación, y eliminando las causas que puedan provocar su marginación.
Si no lo conseguimos, y hablo en presente, estaremos comprometiendo el destino de nuestros hijos y faltando a nuestras responsabilidades.
De ahí, la importancia del tema elegido para esta Cumbre: Juventud y Desarrollo. Si involucramos a la juventud activamente en el desarrollo de nuestros países, lograremos construir sociedades más sólidas, prósperas, justas y participativas. Este es nuestro reto.
En la Cumbre de Santiago de Chile declaramos 2008 como ?Año Iberoamericano de la Juventud?, lo que explica se hayan celebrado en nuestra región numerosas reuniones ministeriales sectoriales, foros y seminarios.
Esfuerzos que culminan con esta reunión, cuyo resultado más tangible será la Declaración de San Salvador que debe proporcionarnos instrumentos útiles para atender las necesidades de nuestra Juventud.
Esta Cumbre se celebra además en un contexto que reclama más que nunca nuestra atención. Me refiero a las graves turbulencias en los mercados financieros internacionales, que concentran la dedicación de autoridades, agentes económicos y sociales, y que exigen reforzar la cooperación internacional.
No me extiendo más. Reitero nuestro reconocimiento y felicitación a la Secretaría General Iberoamericana, con Don Enrique Iglesias a su frente, por su eficaz labor.
Agradecemos asimismo al Presidente de la República de El Salvador su generosa acogida y hospitalidad. Y le felicitamos, junto a su Gobierno, por los desvelos y esfuerzos de la Secretaria Pro Tempore, que hacen posible nuestra reunión.
Cedo ahora la palabra al Señor Presidente del Gobierno de España.
Muchas gracias.