os Príncipes de Asturias presidieron en el Palacio Real el tradicional almuerzo previo a la ceremonia de entrega del Premio Cervantes. En esta ocasión se rindió homenaje al poeta chileno Nicanor Parra, galardonado con el Premio Cervantes 2011, cuya ceremonia de entrega se celebra el lunes, 23 de abril, en la Universidad de Alcalá.
Don Felipe y Doña Letizia, a su llegada al Palacio Real, se dirigieron a la Saleta de Gasparini, donde recibieron el saludo de los invitados al almuerzo, entre los que se encontraban la hija y el nieto del premiado en su representación, Colombina Parra y Cristóbal Ugarte Parra, respectivamente; la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre; el ministro presidente del Consejo Nacional de la Cultura y las Artes de la República de Chile, Luciano Cruz-Coke; el embajador de la República de Chile en España, Sergio Romero, y el director de la Real Academia Española, José Manuel Blecua, entre otras autoridades, académicos, editores y escritores.
Antes de comenzar el almuerzo, Don Felipe dirigió unas palabras en el Comedor de Gala, en las que destacó que en "esta ocasión se da una circunstancia muy especial y excepcional que todos conocen: tanto Sus Majestades los Reyes, anfitriones habituales, como el Premiado, Don Nicanor Parra, muy a su pesar no pueden estar presentes. Por lo que, por un lado, tengo el honor de transmitir el saludo afectuoso que Su Majestad el Rey hace llegar, junto al de Su Majestad la Reina, a todos los presentes; y por otro les ruego a Doña Colombina Parra y Don Cristóbal Ugarte Parra, hija y nieto de Don Nicanor, que además del Premio, le lleven nuestro recuerdo y abrazo más caluroso, el de todos nosotros hoy aquí y el de todos los que nos sentimos unidos en esta patria universal y cervantina de las letras hispanas".
El Príncipe recordó una observación de Nicanor Parra en la que decía que "el gran libro de nuestra lengua comienza remitiéndonos a los dosámbitos fundamentales de la literatura: a la literatura tradicional y popular, que se transmite oralmente, y a la literaturaáulica, letrada", y destacó que "los grandes poetas del español, como Nicanor Parra, han sabido nutrirse a la vez de la tradición popular y de la tradición letrada. No otra cosa hizo el propio Cervantes. Sus obras son, al mismo tiempo, expresión de voces marcadamente personales y de aquello que ya en laépoca de Cervantes comenzó a llamarse "genio de la lengua" y que consistía, según los contemporáneos del autor del Quijote, en propiedad de los conceptos, elegancia de la dicción y agudeza de las ideas".
Su Alteza Real concluyó con un brindis en homenaje "a la palabra viva del maestro Nicanor Parra, palabra hondamente popular, airosa y elegante. Por la poesía de su magnífica Antipoesía".