su llegada al Patio de Armas de la Academia General Militar, Don Juan Carlos y Doña Sofía fueron recibidos por el presidente de la Diputación General de Aragón, Marcelino Iglesias Ricou, el presidente de las Cortes de Aragón, Francisco Pina Cuenca, el jefe del Estado Mayor de la Defensa, general de ejército José Julio Rodríguez Fernández, el jefe del Estado Mayor del Ejército de Tierra, general de ejército Fulgencio Coll Bucher, el director general de la Policía y de la Guardia Civil, Francisco Javier Velázquez López, el inspector general del Ejército, teniente general Fernando Torres González, el jefe del Mando de Adiestramiento y Doctrina, teniente general Francisco Puentes Zamora, y el director de la Academia General Militar, general de brigada Juan AntonioÁlvarez Jiménez, quien entregó al Rey el bastón de mando.
Tras los los honores de ordenanza, Don Juan Carlos pasó revista a las tropas. Seguidamente, Sus Majestades fueron saludados por las autoridades civiles y de Defensa asistentes, entre las que se encontraban el delegado del Gobierno en Aragón, Javier Fernández López, el alcalde de Zaragoza, Juan Alberto Belloch Julbe, el justicia de Aragón, Fernando García Vicente, los consejeros del Gobierno de Aragón Javier Velasco Rodríguez (Presidencia), Alberto Larraz Vileta (Economía, Hacienda y Empleo), Pilar Ventura Contreras (Ciencia, Tecnología y Universidad), Rogelio Silva Gayoso (Política Territorial, Justicia e Interior), el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón, Fernando Zubiri de Salinas, el director general de Reclutamiento y Enseñanza Militar, Javier García Fernández, el mando de la Subdirección General de Apoyo de la Dirección General de la Guardia Civil, teniente general Pascual Solís Navarro, el comandante militar de Zaragoza y Teruel, general de división Juan Pinto Sánchez-Mayoral, el director de Enseñanza, Instrucción, Adiestramiento y Evaluación del Mando de Adiestramiento y Doctrina del Ejército, general de división Juan Mariano Estaún Solanilla, el subdirector general de Ordenación y Política de Enseñanza de la Dirección General de Enseñanza y Reclutamiento Militar, general de brigada Juan Romero Serrano, y el delegado de Defensa de Zaragoza, coronel Carlos Pereyra Niño.
A continuación, los Reyes ocuparon su lugar en la tribuna. Don Juan Carlos concedió permiso al general director de la Academia para iniciar los actos, que comenzaron con una oración de acción de gracias a cargo del a cargo del arzobispo castrense, monseñor Juan del Río. Después de la lectura de la Orden de ascenso de las distintas promociones de oficiales, Su Majestad el Rey condecoró y entregó sus despachos a los números uno de las distintas promociones: David Bardají Horno, teniente de Transmisiones de la Escala Superior de Oficiales del Cuerpo General de las Armas, Sergio Soto Miranda, teniente de la Escala Superior de Oficiales de la Guardia Civil, MiguelÁngel Escola García, teniente de la Escala Facultativa Superior de la Guardia Civil, Santiago Vázquez Manjarrés, alférez de Caballería de la Escala de Oficiales de Cuerpo General de las Armas, Juan Luis Aguiar Cayón, alférez de la Escala de Oficiales de la Guardia Civil, Carlos Catalán Asensi, alférez de la Escala Facultativa Técnica de la Guardia Civil, y Daniel Ballesteros Marcos, alférez de la Escala de Oficiales del Cuerpo de Especialistas de la Guardia Civil.
Comenzó seguidamente la entrega de Reales Despachos al resto de los miembros de las promociones. Una vez finalizada, el general director pronunció una alocución, que dio paso al Homenaje a los que dieron su vida por España. A su término, y después de la orden de romper filas a los nuevos oficiales, Sus Majestades se trasladaron al Salón de Directores.
Tras reunirse con los números uno, los Reyes acudieron al Salón de Actos Sociales, donde tuvo lugar un vino de honor, cuyo brindis corrió a cargo del jefe del Estado Mayor de la Defensa. Una vez concluidos los actos, Don Juan Carlos y Doña Sofía fueron despedidos por las mismas autoridades que les recibieron a su llegada.