n su intervención, el Príncipe de Asturias puso de relieve "que una institución educativa de calidad no solo debe ser un lugar de formación de excelentes profesionales, sino también un Centro que impulse la puesta en marcha de proyectos y promueva sinergias entre la Universidad, la empresa y la sociedad. Por otra parte, no cabe duda de que una investigación de calidad es hoy imprescindible en nuestro desarrollo, al ser la innovación el principal factor de transformación y cambio en los tiempos que vivimos".
Asimismo, el Príncipe de Asturias destacó "la capacidad de adaptación del Instituto a los nuevos tiempos a lo largo de estos últimos veinte años", subrayando que "la formación inicial de profesionales dedicados a la química, el Instituto se ha transformado en un centro universitario multidisciplinario con estudios de Ingeniería Industrial y de Administración y Dirección de Empresas", y que de esta manera, "el Centro sigue el camino de otras instituciones universitarias europeas, firmemente decididas a mejorar su contribución a un modelo sostenible de crecimiento basado en un conocimiento integrador que genere más y mejores empleos, así como más y mejores emprendedores".
También resaltó que el Instituto ha apostado por una "formación científica y técnica de excelencia de sus estudiantes, lo que, sin duda, es fundamental para lograr el continuo desarrollo y la innovación tecnológica de las empresas y poder competir en un entorno globalizado", que al mismo tiempo ha sabido inspirar en sus estudiantes el mejor espíritu emprendedor, animándoles a crear sus propias empresas o a contribuir con su conocimiento y su fuerza creativa a fortalecer otros proyectos empresariales y productivos que redunden en la creación de empleo y de riqueza".
Entre otras personalidades, acompañaron al Príncipe de Asturias en el acto inaugural, la presidenta del Parlamento de Cataluña, Nuria de Gispert; la delegada del Gobierno en la Comunidad Autónoma de Cataluña, María Luisa de los Llanos de Luna; el alcalde de Barcelona, Xavier Trías; el consejero de Economía y Conocimiento de la Generalitat de Cataluña, Andru Mas i Collel; el cardenal Arzobispo de Barcelona, Lluis Martínez Sistach; el sacerdote Jesuita y presidente del Patronato de la Fundación IQS, Enric Puig; el rector de la Universidad Ramón Llul, Josep María Garrell; el provincial de la Compañía de Jesús, Lluìs Magriñà; y el director general de IQS, Pedro Regull.
Don Felipe visitó las aulas de los cursos de grado y máster de IQS, de doctorado de las tres ramas (Química, Bioingeniería y Economía y Empresa), y el aula del Máster de Bioingeniería. Tras departir con los invitados, finalizó el acto siendo despedido por las mismas autoridades que le recibieron a su llegada.
El Instituto Químico de Sarrià tiene su origen en 1905, cuando el Padre Eduardo Vitoria crea en la localidad tarraconense de Roquetes el Laboratorio Químico del Ebro. Posteriormente, en 1916, se traslada a Barcelona y toma la denominación de Instituto Químico de Sarriá. Tras diversas vicisitudes a lo largo de su historia, en 1991 entra a formar parte de la Universidad Ramon Llull, aportando además la Facultad de Economía (ADE).
El nuevo edificio, de 5.000 metros cuadrados, albergará las actividades de la Escuela Técnica Superior IQS y la Facultad de Economía IQS, al mismo tiempo que dará paso a nuevos proyectos de formación para directivos y ejecutivos de sus "Executive Programs". Las nuevas instalaciones contarán con tres sótanos para aparcamiento, con una capacidad total de 159 plazas; un total de 15 aulas de una capacidad media de 60 plazas; 25 despachos para profesores, decanato y servicios administrativos; las dependencias para la IQS Business Alumni y Relaciones Internacionales; zona de aulas de los Programas para Ejecutivos; el laboratorio SEAT del automóvil y una sala de lectura y estudios, que estará abierta los fines de semana.