S
eñor Alcalde,
La Reina y yo agradecemos de todo corazón su amable invitación para visitar la sede de la Municipalidad de Guatemala, así como tan cordiales palabras de bienvenida.
Cumplidos ya doscientos treinta años de la Fundación de la Nueva Guatemala de la Asunción, esta antigua y noble ciudad rebosa dinamismo y energía, al sumar a su extraordinario centro histórico barrios modernos y cosmopolitas. Una ciudad que ha sabido incorporar y asumir el progreso sin perder su personalidad.
Esta mañana hemos tenido la satisfacción de asistir a la firma del documento, por el que España manifiesta su disposición para convertir la antigua Facultad de Farmacia, de la Universidad de San Carlos, en el nuevo Centro Cultural de España en la ciudad de Guatemala.
España quiere contribuir así a reforzar la pujante oferta cultural de esta capital y aportar su apoyo a la política municipal de revitalización de su centro histórico.
Mucho me alegra esta iniciativa que, desde su origen y como en tantas otras ocasiones, ha podido contar con el estrecho entendimiento entre las autoridades municipales y nacionales de Guatemala y España.
También esta mañana hemos tenido el honor de participar en la conmemoración de los Acuerdos de Paz, a través de la sencilla y emotiva ceremonia del cambio de la rosa.
Pocas horas después, celebro tener la oportunidad de volver a encontrarme con quien, como Presidente de la República, fue uno de los artífices del proceso que culminó felizmente con dichos históricos Acuerdos.
Hace diez años, el entonces Presidente Arzú viajaba a España como representante del Gobierno de Guatemala, para recoger, junto con la Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca, el Premio Príncipe de Asturias de Cooperación Internacional.
Quiero recordar las palabras que aún resuenan y que pronunció en su discurso de aceptación del citado Premio:
?La paz firme y duradera? -dijo- ?requiere equidad social y cultural?. ?La lucha contra la pobreza, contra los privilegios y la discriminación? ?continuó- ?es y debe ser una prioridad nacional permanente, porque de ella depende que se ensanche y consolide la unidad del pueblo guatemalteco, que es el principal recurso para construir el presente y el futuro?, para seguir construyendo ?una democracia sin exclusiones?, ?que libere el potencial creativo del pueblo guatemalteco?.
Señor Alcalde, querido amigo,
Me complace reiterar la determinación de España para seguir acompañando esta paz, lograda con tanto esfuerzo, así como nuestro apoyo para que este proceso se consolide y llegue, con sus efectos beneficiosos, a toda la población de Guatemala.
Quiero concluir reiterándole nuestro agradecimiento y enviando, a través del Señor Alcalde y de todos los miembros de esta Municipalidad, un afectuoso saludo a la población de esta ciudad, que tan calurosamente ha querido recibirnos y que está tan cerca en nuestro corazón y en el de los españoles.
Muchas gracias.