S
eñor Alcalde,
Muchas gracias por la Medalla de Oro y las llaves de la ciudad que acabáis de entregarme.
Este acto tiene para mí un significado especial, personal. Atenas ocupa en mi vida un lugar único y es en ella una referencia indispensable. Aquí nos casamos y disfruté por primera vez de las cualidades de vuestro carácter y de la generosa acogida que en aquella ocasión me dispensásteis.
Gracias a la Reina, y con ella, he tenido la oportunidad de vivir Atenas desde dentro, y además en una ocasión en que las impresiones y recuerdos se fijan en forma indeleble y con los acentos más gratos y evocadores.
Por eso siento como algo personal el aire y la vitalidad de la Atenas moderna y actual, de esta ciudad que es hoy enormemente significativa para España y Europa.
Cuna de la democracia, pionera de la estrecha relación entre los espacios económicos y las realidades políticas, ciudad universitaria por excelencia de la Antigüedad, y sede de los maestros y las escuelas que investigaron y proclamaron la realidad y el destino del espíritu humano y su proyección ecuménica, la Atenas clásica y su lengua siguen siendo el hogar y el faro de la civilización occidental, de un humanismo dirigido y administrado por la libertad y la razón.
Patrimonio de Europa y de la Humanidad, Atenas no concluye su historia en sus soberbios monumentos. Tiene su propia vida como metrópoli y capital de Grecia, que se manifiesta en un prodigioso despliegue urbanístico, el desarrollo de modernas industrias y el tráfico de su puerto, que traduce el destacado papel de los griegos de hoy en el mundo del comercio y los negocios.
En este acto, y en este Ayuntamiento, saludamos y elogiamos el importante esfuerzo que vuestra ciudad está realizando para avanzar y afianzarse en los caminos y las claves de la modernización, para desempeñar activamente el papel que le corresponde en el ámbito mediterráneo y europeo del siglo XXI.
Celebramos también que este proceso conviva con el bullicioso encanto de sus calles y plazas, donde los atenienses viven y recrean a diario la poesía de Kavafis y sus sentidas referencias, tan específicamente griegas, a los "alrededores de casa, lugares de encuentro, del barrio que estoy viendo y por donde paseo años y años".
Atenas se enfrenta hoy a nuevos retos de cara al futuro, y muy especialmente a la organización de los Juegos Olímpicos del año 2004. Os felicitamos por el gran triunfo que constituye el haber recibido este encargo del Comité Olímpico Internacional, y estamos seguros que este importante acontecimiento deportivo de alcance universal será un gran éxito y tendrá un impacto favorable en la imagen y el porvenir de esta ciudad.
Os agradecemos, Señor Alcalde, la acogida que Atenas nos ha dado, y hacemos votos por su prosperidad, que sentimos como algo cercano y casi nuestro.
Muchas gracias.