Su Majestad el Rey en su intervención recordó “…hace apenas un año, el acto de presentación del Anuario tuvo lugar en un contexto bien distinto. Fue un acto reducido, sin público presencial, y en la atmósfera se percibían la incertidumbre, la tristeza, incluso cierta desazón. Pero fue a la vez un evento esperanzador, el primero al que acudíamos tras el confinamiento estricto. Hablamos entonces de volver a vernos este año, de forma presencial… y aquí estamos. No estamos todos, ni estamos todo lo cerca que nos gustaría. Pero aquí estamos. Y eso es lo que verdaderamente importa…” y señaló que “…es la innovación la que marca el reloj de nuestra especie y, con el tiempo, será la vacuna −y no el virus− la que señale el comienzo de una nueva era…”
También, Don Felipe continuó diciendo sobre el Anuario COTEC que “…es −como señalan sus páginas− un homenaje a quienes, en los momentos de mayor incertidumbre, tuvieron que adaptarse muy rápidamente −casi sin capacidad para asimilar los cambios que se sucedían−, investigar día y noche, transformar sus fábricas y laboratorios y unirse para cooperar a distancia, muchas veces sin conocerse. En ocasiones, incluso poniendo en riesgo su propia salud, al igual que hicieron nuestros sanitarios y el resto de profesionales esenciales y servidores públicos en primera línea en las peores circunstancias de la pandemia…”
Destacó Su Majestad el Rey con sus palabras que "...conviene no olvidar que las grandes crisis no respetan tiempos ni distancias. Por eso, además de acelerar la velocidad a la que innovamos, hemos de imprimir un nuevo ritmo a la difusión de las innovaciones. Lo vemos ahora con la vacuna y lo veremos cada vez con mayor frecuencia en otros ámbitos: tan importantes son las políticas de promoción de la innovación, como las que facilitan el acceso de la Humanidad a sus numerosos beneficios..."