Gracias, Elizabeth; muy buenas tardes y gracias a todas las personas que hoy nos acompañáis y que queréis, queremos, saber cómo la tecnología y su uso estratégico reducen las desigualdades. Es lo que la Fundación Microfinanzas BBVA pretende para dar acceso a la inclusión financiera a millones de personas que lo tienen muy difícil.
Lo veremos enseguida con María, una mujer llena de fuerza y determinación que ha salido adelante junto a sus cuatro hijos con un pequeño negocio que inició gracias a un microcrédito. Fue de la mano de Rony, que hoy también está aquí, y que, como asesor, acompañó a María en el uso de las aplicaciones para poder operar con su entidad, en este caso Financiera Confianza de Perú.
Escuchar a María y a Rony es muy pertinente porque ellos dan sentido al esfuerzo de la Fundación Microfinanzas BBVA para que las inequidades, la pobreza y la exclusión social den paso a un desarrollo inclusivo, sostenible e igualitario.
En tiempos en los que se debate sobre la inteligencia artificial y el análisis de datos masivos, hay millones de personas para quienes una aplicación, la geolocalización, el reconocimiento por voz, por ejemplo, consiguen poner en marcha su modo de vida gracias a la concesión de un pequeño crédito. Y garantizan así su supervivencia y la de sus hijos. Me refiero a una vivienda digna, a la formación necesaria, a servicios básicos de salud.
Gracias por hacerlo posible y por constatar en días como hoy que verdaderamente estáis transformando, mejorando, la vida de tantas personas. No repetiré las cifras, pero la Fundación que nos convoca tiene perfectamente medido su impacto y es abrumador y benéfico.
Vamos a escuchar enseguida a quienes saben cómo funciona todo en la conversación sobre las microfinanzas en la era digital, Elizabeth...
¡Muchas gracias!