l Rey ha mantenido una conversación telefónica con el presidente de la Conferencia Episcopal Española y cardenal arzobispo de Barcelona, monseñor Juan José Omella.
En el diálogo, don Felipe, ha trasladado el pésame por los sacerdotes diocesanos fallecidos, casi un centenar por COVID19 y se ha interesado por los obispos, religiosos y voluntarios católicos que han sido contagiados y por lo que la pandemia ha afectado al desarrollo de la acción pastoral y a la vida de las personas y familias.
La Comisión Ejecutiva de la CEE ha sugerido a los obispos que cada cual en su diócesis proponga a sus sacerdotes entregar una parte de su sueldo o una parte fija durante un tiempo determinado.
Monseñor Omella ha explicado que durante la crisis de la COVID19 la Iglesia Católica ha multiplicado sus esfuerzos y ha estado muy involucrada donde le correspondía de la primera línea sanitario y asistencial.
El Rey ha reconocido también la labor social y asistencial a través de centros de acogida, comedores y otros servicios que se llevan a cabo desde asociaciones y ong’s vinculadas a la Iglesia católica en España.
Según datos anteriores a la emergencia sanitaria, en el último año refernciado, 2018, en los centros sociales y asistenciales de la Iglesia fueron atendidas 4.095.346 personas, con estas cifras en detalle:
• 973 centros socio sanitarios (hospitales, ambulatorios y casas para ancianos, enfermos o personas con discapacidad) que atendieron a 1.291.019 personas.
• 8.146 centros socio asistenciales (centros para mitigar la pobreza, para menores, para promover el trabajo, asistencia a emigrantes, promoción de la mujer, etc.) que atendieron a 2.804.327 personas
• menores y jóvenes en riesgos de exclusión (421 centros y 64.490 atendidos).
• Personas en búsqueda de trabajo (369 centros y 141.316 beneficiarios).
• Eemigrantes y refugiados (131 centros y 134.406 asistidos).
• Mujeres maltratadas y en riesgo de exclusión (105 centros y 23.279 beneficiarias).
• Personas víctimas de la droga y de nuevas adicciones (99 centros y 50.297 asistidos).
• Personas y familias víctimas de la pobreza (6.369 centros con 2.127.487 beneficiarios).
Dos organizaciones especialmente significativas son Cáritas, con 84.551 voluntarios y 5.671 trabajadores ofrece 5.739 centros y servicios que beneficio a 2,68 millones de personas; y Manos Unidas, con 5.347 voluntarios afrontaron 564 nuevos proyectos en los que beneficiaron a 1,42 millones de personas.
Algunos datos sobre la Iglesia Católica en España (2018):
• 70 diócesis (69 diócesis territoriales, a las que hay que unir el Arzobispado Castrense) con 22.997 parroquias, atendidas por 17.337 sacerdotes y 436 diáconos permanentes.
• 409 institutos religiosos distribuidos en 4.785 comunidades formadas por 38.688 religiosos.
• 783 monasterios con 9.151 monjas y monjes de clausura.
• 13.149 entidades religiosas y asociaciones de fieles que promueven múltiples iniciativas.
• 86 asociaciones y movimientos de laicos de ámbito nacional con 412.173 miembros.
• 2.586 centros católicos dan clase a 1,52 millones de alumnos.En estos centros trabajan 130.448 personas, de los que 106.005 son docentes.
• Hay 429 centros de educación especial con 11.710 alumnos.
• En el ámbito universitario 15 universidades vinculadas con la Iglesia dan clases a 115.050 alumnos en grados y postgrados.
La Conferencia Episcopal Española (CEE) es una institución colegial integrada por los Obispos de España, en comunión con el Romano Pontífice y bajo su autoridad. Su objetivo es promover la vida de la Iglesia y fortalecer su misión evangelizadora.
Monseñor Juan José Omella nació en la localidad de Cretas, provincia de Teruel y archidiócesis de Zaragoza, el 21 de abril de 1946. Estudió en el Seminario de Zaragoza y en Centros de Formación de los Padres Blancos en Lovaina y Jerusalén. El 20 de septiembre de 1970 recibía la ordenación sacerdotal.
Cargos pastorales:
En su ministerio sacerdotal, trabajó como Coadjutor y como Párroco y entre 1990 y 1996 como Vicario Episcopal en la diócesis de Zaragoza. Durante un año fue misionero en Zaire.
El 15 de julio de 1996 fue nombrado Obispo auxiliar de Zaragoza. Fue ordenado Obispo el 22 de septiembre de ese mismo año. El 27 de octubre de 1999 fue nombrado Obispo de la diócesis de Barbastro-Monzón. Entre 2001 y 2003 fue Administrador Apostólico de Huesca y también Administrador Apostólico de Jaca. En 2004 es nombrado Obispo de la diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño.
Ha sido Consiliario Nacional de Manos Unidas (1999-2015).
Desde 2015 es Arzobispo de Barcelona.
Creado cardenal por el papa Francisco el 28 de junio de 2017.
Otros datos de interés:
Es el presidente de la Conferencia Episcopal Española desde el 3 de marzo de 2020. Preside las reuniones de la Comisión Permanente y de la Comisión Ejecutiva de la CEE, así como el Consejo de cardenales.