n el marco de la actual presidencia sueca de la Unión Europea, este país ha organizado una serie de actividades para conmemorar el vigésimo aniversario de la Convención de Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño.
Este tratado, aprobado por la Asamblea General de las Naciones Unidas el 20 de noviembre de 1989, reconoce la especial vulnerabilidad de la infancia y recoge en unúnico código medidas de protección de los niños, que abarcan todos los tipos de derechos humanos. En la Convención se garantiza firmemente la no discriminación y se reconoce que todas las medidas deben orientarse en función del interés superior del niño. Se presta especial atención a los niños refugiados, con discapacidad o pertenecientes a minorías. Los Estados han de establecer garantías para la supervivencia, el desarrollo, la protección y la participación de los niños.
Además de Su Majestad la Reina, asistieron a los distintos actos de la jornada, invitadas por Su Majestad la Reina Silvia de Suecia, anfitriona del evento, Su Majestad la Reina Beatriz de los Países Bajos, Su Majestad la Reina Paola de Bélgica, Su Alteza Real la Gran Duquesa María Teresa de Luxemburgo, Margarida Sousa de Durão Barroso, Sus Altezas Reales las Princesas Victoria y Magdalena de Suecia, Su Alteza Real la Princesa Mette-Marit de Noruega y Su Alteza Real la Princesa Mary de Dinamarca.
A su llegada al Aeropuerto de Arlanda de Estocolmo, Doña Sofía fue recibida por el "first marshal" de la Corte sueca, Lars-Hjalmar Wide, y el embajador de España en Suecia, Enrique Viguera. Seguidamente, la Reina se trasladó al Palacio Real para asistir al seminario conmemorativo del vigésimo aniversario de la Adopción de la Convención de Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño, que tuvo lugar en la sala del Comedor de la Reina Lovisa Ulrika.
La reunión comenzó con las palabras de bienvenida de Su Majestad la Reina Silvia de Suecia. Posteriormente, tuvieron lugar tres presentaciones: la primera, sobre las actividades iniciadas por el grupo de trabajo para difundir información relativa a la Convención; la segunda, que relató la experiencia de 30 años desde que se aprobó la Ley de Prohibición de los Castigos Físicos en Suecia, y laúltima, sobre la organización no gubernamental BRIS (Los Derechos del Niño en la Sociedad) y la actividad del Defensor del Menor.
Tras asistir al seminario, Su Majestad visitó un "Barncentrum" (centro de menores) de Estocolmo, que ofrece ayuda a niños que han sido víctimas de acoso o abusos.
Las actividades de Doña Sofía en Estocolmo finalizaron con un concierto ofrecido por el Gobierno sueco en el "Berwaldhallen" de Estocolmo, a cuyo término emprendió regreso a España.