Quiero que mis primeras palabras sean de agradecimiento a todas las personas e Instituciones que con su trabajo, esfuerzo e ilusión han hecho posible que hoy podamos celebrar este acto. Sin la generosa colaboración de las diferentes Administraciones (Estatal, Autonómica y Local), y de importantes sectores de la sociedad civil, este Proyecto no podría haber llegado a buen puerto.
Con la colocación de la Primera Piedra del Proyecto Alzheimer culminamos un largo recorrido en el que el estudio, el análisis, los debates, las reuniones y los encuentros de todos los participantes en la gestión y desarrollo del Proyecto han sido constantes, porque queríamos conseguir lo mejor para los enfermos de Alzheimer. Confiamos en haberlo conseguido.
El Proyecto, ya finalizado en todos sus aspectos arquitectónicos, está todavía pendiente de culminación financiera. Su gran calidad, y la adecuada adaptabilidad a las necesidades específicas de los enfermos han elevado su coste final, por lo que seguimos recabando el apoyo solidario de la sociedad para dar un final feliz a nuestro sueño.
"...Mi Fundación quiere ser, unida a la Corona, un eficaz instrumento de trabajo en beneficio de la sociedad española...."
La colocación de la Primera piedra abre también un futuro ilusionante porque el Proyecto Alzheimer no nace exclusivamente para este Complejo Sociosaniario. En mi Fundación entendemos que el Proyecto que hoy empieza a crecer es una solución eficaz, generosa y solidaria que puede servir de modelo para afrontar otras carencias de la sociedad.
La simbiosis conseguida en este Proyecto entre Administración y sociedad civil, bajo el impulso de la Corona, es un ejemplo de la fortaleza moral y el espíritu emprendedor de la sociedad cuando se la convoca para causas de interés general.
Mi Fundación quiere ser, unida a la Corona, un eficaz instrumento de trabajo en beneficio de la sociedad española. El Proyecto Alzheimer es sólo una muestra de lo que todos juntos podemos conseguir, cuando se logra subordinar los intereses particulares y personales a los superiores del bien común.
A nuestro queridos enfermos de Alzheimer, a sus familiares y amigos que de forma tan directa y cercana sufren las consecuencias de su mal, quiero decirles que hoy es un día de esperanza.
Es cierto que tal vez se tarde aún un tiempo en descubrir las causas de la enfermedad, pero también es cierto que ahora se inicia un nuevo camino que abre mejores posibilidades de tratamiento y cuidado. Hoy, en cierto modo, los que se olvidaron de vivir empiezan a recuperar, gracias al esfuerzo de todos, la sonrisa y la ilusión que proporciona siempre el inicio de una nueva aventura.
Gracias otra vez a todos. Gracias por su generosidad. Gracias por su apoyo.