ste acto conmemora la sesión constitutiva de las Córtes de Cádiz, celebrada el 24 de septiembre de 1810 en la Real Isla de León, cuyo trabajo culminaría con la aprobación, el 19 de marzo de 1812, de la Constitución de Cádiz, primer texto constitucional de nuestra historia moderna.
La sesión parlamentaria se inscribe en el marco del conjunto de celebraciones y conmemoraciones que tienen lugar en las localidades de Cádiz y San Fernando entre 2010 y 2012, con la finalidad de recordad a las primeras Cortes españolas reunidas entre 1810 y 1812 en estas localidades.
A su llegada a la calle Real de San Fernando, Don Juan Carlos y Doña Sofía fueron recibidos por el presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, el presidente del Senado, Javier Rojo, la presidenta del Tribunal Constitucional, María Emilia Casas, el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Dívar, el presidente de la Junta de Andalucía, José Antonio Griñán, la ministra de Igualdad, Bibiana Aido, la presidenta del Parlamento de Andalucía, Fuensanta Coves, el delegado del Gobierno en Andalucía, Juan José López Garzón, el alcalde de San Fernando, Manuel de Bernardo -quien hizo entrega a Su Majestad el Rey del bastón de mando-, el jefe del Estado Mayor de la Defensa, general del aire José Julio Rodríguez, el almirante de la Flota, almirante Juan Carlos Muñoz-Delgado, y el comandante general de Infantería de Marina, general de división Juan Antonio Chicharro.
Tras los correspondientes honores de ordenanza y pasar Don Juan Carlos revista, Sus Majestades fueron saludados por los miembros de la Corporación Municipal de San Fernando. Seguidamente, accedieron al interior de la Iglesia Mayor Parroquial de San Pedro y San Pablo y se dirigieron al presbiterio bajo, lugar donde se produjo el juramento de los diputados el 24 de septiembre de 1810. Allí, Sus Majestades firmaron en el libro de honor del Ayuntamiento de San Fernando y se fotografiaron con los actores que representaban la pintura de Casado del Alisal inmortalizando el momento del juramento.
Los Reyes regresaron de nuevo a la calle Real para presidir el desfile militar, a cuyo término se trasladaron hasta el Real Teatro de las Cortes. Después de las palabras de bienvenida del alcalde de San Fernando, Don Juan Carlos descubrió una placa conmemorativa de la designación por las Cortes Generales del Real Teatro de las Cortes como primer edificio constitucional de España.
A continuación, Sus Majestades accedieron al interior del teatro y ocuparon su lugar en la mesa presidencial. Con la interpretación del Himno Nacional dio comienzo la sesión parlamentaria institucional del Congreso de los Diputados y del Senado conmemorativa del bicentenario de la convocatoria a Cortes Generales y extraordinarias de 1810. Tras pedir la venia al Rey, el presidente del Congreso de los Diputados abrió la sesión y anunció las intervenciones de la periodsta Sandra Golpe, quien dio lectura a un fragmento sobre las Cortes de la Isla de León de los "Episodios Nacionales" de Benito Pérez Galdós-, y a Sara Dueñas, la parlamentaria más joven en activo, quien dio lectura al Decreto I de 24 de septiembre de 1810, declarando la legítima constitución de las Cortes y su soberanía.
Después de los discursos de los presidentes del Senado y del Congreso de los Diputados, intervino Su Majestad el Rey, quien expresó su "especial alegría y emoción al conmemorar, con la participación de todos los poderes del Estado, un hecho de crucial importancia para la Historia de España", en el que las Cortes "se reunieron en representación de una Nación orgullosa de su identidad y decidida a tomar las riendas de su propio destino".
Don Juan Carlos recordó que "por primera vez las Cortes eran concebidas como representativas de la voluntad general y depositarias de la soberanía nacional. También entonces, por vez primera, unas Cortes adoptaban valores, principios y reglas esenciales para hacer de España una Nación llena de esperanza que así afrontaba la modernidad. Esta Casa se convirtió en sede de la palabra, de la razón y de la libertad. Eranéstas las armas más poderosas de unos ciudadanos libres e iguales, dispuestos a luchar contra la amenaza y la opresión, y a sentar las bases del progreso. Aquellos hombres forjaron los primeros pilares de nuestro Estado de Derecho, promulgaron derechos individuales, consagraron la igualdad, establecieron la división de poderes y proclamaron, entre otras muchas, la libertad de imprenta. Tejieron así los mimbres necesarios para ir edificando una España justa y solidaria que entraba en la era contemporánea, tras decretar el tránsito del Antiguo Régimen a la sociedad liberal".
Asimismo, Su Majestad manifestó su "admiración, reconocimiento y gratitud, a la ingente labor de aquellos Diputados de ambos hemisferios. Unos Diputados que hicieron posible el inicio del moderno parlamentarismo y constitucionalismo, no sólo en España, sino también -y al mismo tiempo- en todo el mundo de habla española", y destacó la influencia de la Constitución de Cádiz en las Cartas Magnas de las Repúblicas iberoamericanas, así como su influencia en otras partes de nuestro continente.
Concluyó Don Juan Carlos poniendo de relieve que el espíritu de las Cortes de Cádiz sirvió de guía "hace tres décadas a nuestros constituyentes para construir una España moderna, unida, diversa y solidaria, en torno a una Constitución de todos y para todos. Una Constitución que nos ha proporcionado el más largo período de estabilidad y prosperidad en libertad".