sta unidad, que celebra su quinto centenario, es la más antigua de nuestros ejércitos. Fue creada en 1509, cuando, tras la muerte de la Reina Isabel la Católica, el Rey Fernando envía a Italia 5.000 soldados para defender Nápoles y auxiliar al Papa. El Regimiento ha estado presente en numerosas campañas, durante las que ha combatido en Inglaterra, Francia, Italia, Austria, Bélgica, Holanda, Alemania, Orán, Gibraltar, Ifni, Marruecos, Cuba, Pensacola, Cuba y Perú. En su organización actual, ha participado en las misiones de mantenimiento de la paz desarrolladas en Bosnia, Kosovo y Afganistán.
Para conmemorar su quinto centenario, han tenido lugar numerosas actividades, desarrolladas en Fuerteventura, Soria, Sevilla y Toledo.
A su llegada al Patio de Armas del Acuartelamiento "Puerto del Rosario", Su Majestad el Rey fue recibido por el presidente del Gobierno de Canarias, Paulino Rivero Baute, el jefe del Mando de Canarias, teniente general José Luis Vega Alba, y el jefe del Regimiento de Infantería Ligera "Soria" 9, coronel Carlos Antonio Terol Bono.
Tras recibir el Bastón de Mando y los correspondientes honores, Don Juan Carlos pasó revista y recibió el saludo del resto de personalidades asistentes, entre las que se encontraban el presidente del Parlamento de Canarias, Antonio Castro Cordobez, la delegada del Gobierno en Canarias, Carolina Darias San Sebastián, el alcalde-presidente del Ayuntamiento de Puerto del Rosario, Marcial Morales Martín, el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Canarias, Antonio Castro Feliciano, el fiscal jefe del Tribunal Superior de Justicia de Canarias, Vicente Garrido, y el presidente del Cabildo Insular de Fuerteventura, Mario Cabrera González, entre otras.
Su Majestad accedió seguidamente a la Tribuna, desde donde presidió el acto, que comenzó con la lectura de la Reseña Histórica del Regimiento. El Rey impuso la Corbata a la Bandera del Regimiento y los representantes de las entidades colaboradoras en las celebraciones del quinto centenario del Regimiento recibieron unos medallones conmemorativos. Además, el coronel jefe del Regimiento entregó una placa al alcalde de la localidad.
Tuvo lugar a continuación un acto de homenaje a los que dieron su vida por España, que fue seguido por una parada militar, que incluyó el sobrevuelo de cuatro F-18 del 462 Escuadrón. Una vez finalizado el desfile, Don Juan Carlos firmó en el libro de honor e inauguró el monumento "Arcabucero español año 1508", ofrecido por la localidad de Puerto del Rosario.
Un vino de honor, cuyo brindis corrió a cargo del jefe del Mando de Canarias, puso fin a los actos, siendo Su Majestad despedido por las mismas personalidades que le recibieron a su llegada.