as Reales Maestranzas son unas corporaciones nobiliarias, cuyo origen se remonta al siglo XVII, que nacieron con el fin de que la nobleza se preparase y ejercitase en el arte de la guerra con el objetivo de formar parte de los ejércitos reales. Con el paso del tiempo, estas instituciones han ido adaptando sus fines, desarrollando en la actualidad un amplio abanico de actividades centradas en áreas culturales, artísticas, sociales, educativas y asistenciales, principalmente. Existen en España cinco Maestranzas de Caballería: Granada, Ronda, Sevilla, Valencia y Zaragoza.
Estas cinco instituciones se reúnen anualmente para poner en común experiencias y aunar proyectos en el marco del cumplimiento de sus fines. En esta ocasión, la Real Maestranza de Caballería de Valencia es la anfitriona de este encuentro, que se celebra durante los días 10 y 11 de mayo.
Su Alteza Real la Infanta Doña Elena acudió a la Real Basílica de Nuestra Señora de los Desamparados para asistir a la ofrenda realizada por los cinco tenientes de hermano mayor, José María Álvarez de Toledo, conde de la Ventosa, de la Real Maestranza de Caballería de Valencia; Rafael de Atienza y Medina, marqués de Salvatierra, de la Real Maestranza de Caballería de Ronda; Javier Benjumea Llorente, marqués de Puebla de Cazalla, de la Real Maestranza de Caballería de Sevilla; Ignacio Pérez de Herrasti y Narváez, de la Real Maestranza de Caballería de Granada, y Pedro de Sancristóval y de Murúa, conde de Isla, de la Real Maestranza de Caballería de Zaragoza.
Acompañaron a Doña Elena el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra, la delegada del Gobierno en la Comunidad Valenciana, Paula Sánchez de León, la alcaldesa de Valencia, Rita Barberá, el arzobispo de Valencia, Carlos Osorio, y el rector-prior de la Basílica de Nuestra Señora de los Desamparados, Juan Bautista Antón, entre otras personalidades.
Una vez realizada la ofrenda y después de la oración del arzobispo de Valencia, la Infanta besó la mano de la Virgen. Tras concluir el acto religioso, tuvo lugar una recepción en la casa de la Real Maestranza de Caballería de Valencia a la que asistieron más de un centenar de invitados.