l 4 de abril de 1910, Su Majestad el Rey Don Alfonso XIII dio comienzo a las obras del primer tramo de la Gran Vía, entre la calle Alcalá y la Red de San Luis. Esta construcción fue la obra pública más importante que se realizó en Madrid en el primer tercio del siglo XX. Se expropiaron 327 edificios en 30 manzanas, afectando a una superficie de más de 140.000 metros cuadrados, que supuso la formación de 32 nuevas manzanas y de una avenida de casi un kilómetro y medio de longitud. Durante estos cien años se ha convertido en una de las arterias más representativas de Madrid, no sólo desde el punto de vista urbanístico, sino por el papel social, económico y cultural que ha jugado en la vida de la ciudad.
Sus Majestades los Reyes, a su llegada a la intersección de la Gran Vía con la Calle Alcalá, fueron recibidos por el ministro de Fomento, José Blanco, y el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón. Acto seguido, fueron saludados por los tenientes del alcalde, los portavoces de los Grupos Municipales, la junta de Gobierno de la ciudad de Madrid, el concejal-presidente del Distrito Centro y el presidente de honor de la Comisión de Empresarios de la Gran Vía.
Tras descubrir un monolito de chapa y bronce conmemorativo del centenario, los Reyes se trasladaron a "La Casa del Libro" -edificio que alberga desde 1923 la sede de la Editorial Espasa-Calpe y en el que tuvo su despacho Don José Ortega y Gasset-. Allí fueron recibidos por el director general de la Casa del Libro, Félix Hernández. Seguidamente, Don Juan Carlos y Doña Sofía accedieron al interior del edificio, donde les mostraron diferentes publicaciones de losúltimos 100 años de la editorial y fueron obsequiados con un ejemplar de una edición especial de las obras completas de Miguel Hernández, con motivo del centenario del nacimiento del poeta.
Finalizado el acto de la Casa del Libro, se trasladaron a la sede delÁrea de Gobierno de Economía, Empleo y Participación Ciudadana y delÁrea de Gobierno de Las Artes del Ayuntamiento de Madrid, donde fueron recibidos por el presidente del Congreso de los Diputados, José Bono, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre. A continuación, accedieron al interior del edificio y en el vestíbulo principal visitaron la exposición "Gran Vía", en la que se encuentran expuestas diez fotografías y vídeos correspondientes a cada una de las diez décadas de la Gran Vía.
A continuación, Sus Majestades se dirigieron al Salón de Baile, donde ocuparon su lugar en una tarima. Tras las palabras del alcalde de Madrid, los Reyes recibieron de manos del alcalde una pequeña reproducción de un grabado del plano de la Gran Vía en madera y aluminio. Después de departir Don Juan Carlos y Doña Sofía durante unos instantes con los invitados concluyeron los actos.