ste encuentro reunió, del 15 al 17 de marzo, a especialistas de Numismática, Protohistoria, Arqueología e Historia Antigua, tanto españoles como extranjeros, para tratar el impacto que la invención de la moneda tuvo en las economías premonetales de fenicios, griegos, romanos, cartagineses, celtas, galos e iberos, con el fin de contrastar las variantes del cambio mental que su inicial utilización produjo entre las culturas en contacto y entre sus propias clases sociales.
A su llegada al Centro de Ciencias Humanas y Sociales del Centro Superior de Investigaciones Científicas (CSIC), Doña Sofía fue recibida por la subsecretaria de Cultura, Mercedes del Palacio, el presidente del CSIC, Rafael Rodrigo, y el director del Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC, Eduardo Manzano. Seguidamente, la Reina fue saludada por los coordinadores del Congreso, las investigadoras del CSIC María Paz García-Bellido y Alicia Jiménez y el profesor de la Universidad de Pau et des Pays de l'Adour, Laurent Callegarin, el director de la Casa de Velázquez (entidad coorganizadora del Congreso), Jean-PierreÉtienvre, el director del Instituto de Historia del Centro de Ciencias Humanas y Sociales del CSIC, Leoncio López-Ocón, la presidenta de la Comisión Numismática Internacional, Carmen Arnold-Biucchi, y el conferenciante John H. Kroll.
Su Majestad siguió desde la primera fila de butacas del salón de actos la conferencia "Money of the Greeks and their Eastern neighbours before the advent coinage, and after", pronunciada por el profesor Kroll. A su término, Doña Sofía se dirigió al estrado y ocupó su lugar en la mesa presidencial. Tras abrir la sesión, la Reina concedió sucesivamente la palabra a María Paz García-Bellido, al director de la Casa de Velázquez y al presidente del CSIC.
Una vez finalizadas estas intervenciones, Doña Sofía declaró clausurado el Congreso y levantó la sesión. Antes de concluir el acto, Su Majestad visitó una muestra de libros y revistas del archivo español de arqueología del CSIC y fue obsequiada con una moneda de plata de hace 2200 años (un denario ibérico), acuñada en la ciudad de Bolskan (actual Huesca), cuyo topónimo está escrito en ibérico.