e trata de una mansión del Siglo XVII,es una mezcla de estilo señorial y rústico, situada a 15 Km. de Palma en la Sierra de la Tramuntana, rodeada de vegetación, jardines y fuentes naturales.
En la parte central del jardín se erige una pareja de araucarias, si bien el autentico protagonista es un tejo que se puede admirar junto a uno de los extremos del estanque. El tejo fue durante siglos un árbol muy apreciado, dada la dureza de su madera, y a la vez temido, por lo mortífero de sus frutos. El ejemplar de La Granja es muy singular al ser uno de los contados ejemplares de esta especie en la isla, así como por su carácter milenario y por las formas barrocas de su tronco y de sus ramas entrelazadas.
En La Granja podemos encontrar una muestra de animales típicos de granja, como faisanes, patos y ocas. También podemos encontrar otros típicos del bosque como francocolines y los gamos. Mención aparte merece el porc negre (cerdo negro mallorquín), especie autóctona, cuya carne es la base para la elaboración de embutidos isleños de mejor calidad (sobrassada, llegonissa, botifarró, camaiot, etc. ). También son habituales la cabra mallorquina, el conejo, la liebre, el milano, el cernícalo, la paloma torcaz, la perdiz, la tórtola, la codorniz, el alcaudón, el gorrión, el jilguero, el verderón, y en algunas ocasiones el buitre negro.
La Granja muy valorada ya en tiempo de los romanos por el gran caudal de sus aguas, cuenta aún hoy con un magnífico surtidor de presión natural de treinta pies de altura, que da testimonio de su potencia. Fue también de gran interés para los moros que dominaron la isla desde el Siglo X hasta el XIII.
Con la conquista cristiana de 1229, se inicia un breve período de tiempo de posesión feudal, hasta que el 1239 fue cedida a los monjes cistercienses que la regentaron durante 200 años, hasta que pasó a D. Mateo Vida. Durante otros 200 años dicha familia la ocupó hasta que pasó a los Sres. Fortuny. El actual propietario es D. Cristóbal Seguí Colom.