Ante todo, muy sincera y profundamente os doy las gracias por esta Alta Distinción de la Generalitat Valenciana que recibo con orgullo y con un sentimiento lleno de admiración y cariño por esta tierra y por el pueblo valenciano. Además, recibir la Gran Cruz de la Orden de Jaume Ier el Conqueridor, no es solo un enorme honor, sino también una manera de recordar y asumir con respeto y afecto la historia que nos une, que nos identifica y que nos proyecta al futuro.
También al recibir tan alto honor quiero reafirmar mi compromiso de ser fiel a los valores que la Corona representa en nuestro tiempo, como órgano que encarna la Jefatura del Estado en nuestro ordenamiento constitucional y su máxima representación dentro y fuera de España, atendiendo y cuidando nuestra diversidad y llevando con dignidad, respeto y humildad la herencia histórica de la Monarquía.
"...al recibir tan alto honor quiero reafirmar mi compromiso de ser fiel a los valores que la Corona representa en nuestro tiempo, como órgano que encarna la Jefatura del Estado en nuestro ordenamiento constitucional y su máxima representación dentro y fuera de España, atendiendo y cuidando nuestra diversidad y llevando con dignidad, respeto y humildad la herencia histórica de la Monarquía.
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Els valencians sou gent emprenedora, dinàmica, solidària, compromesa amb la vostra terra i amb el conjunt d’Espanya. La Comunitat Valenciana aporta molts dels millors valors amb els quals el nostre país pot i ha d’avançar en un món cada vegada més competitiu i globalitzat. El caràcter valencià –que es definix per la seua vitalitat, la seua empenta i el seu coratge davant els desafiaments del dia a dia– provoca un just i merescut sentiment de simpatia i admiració a tota Espanya.
Os digo, os decía que recibo también esta distinción con un inmenso cariño que siento de corazón y que sé que es recíproco. No solo desde el plano personal, en cada una de las ocasiones en las que tengo la oportunidad de relacionarme con vosotros, sino también desde la perspectiva institucional al apreciar profundamente vuestra lealtad.
Todas estas razones, por las que la Comunidad Valenciana y sus ciudadanos son tan admirables, son las mismas que hacen de esta tierra y de su pueblo un ejemplo y un estímulo para el conjunto de España en su camino de progreso y de futuro.
Me alegra mucho estar de nuevo en Valencia y poder encontrarme con sus instituciones, dirigentes y sociedad civil; de poder acercarme a celebrar su industria puntera y tecnológica en el sector hortofrutícola; de participar en una gran cita ─nacional e internacional─ del cooperativismo agroalimentario; y, en definitiva, de poder saludar desde este Salón Dorado del Palacio de la Generalitat Valenciana a todos los hombres y mujeres de esta tierra tan vital y apasionada y, tan querida.
Muchas gracias, una vez más, por esta Alta Distinción.