su llegada a la Escuela Naval Militar, Don Juan Carlos y Doña Sofía fueron recibidos por el presidente de la Xunta de Galicia, Alberto Núñez Feijóo, la ministra de Defensa, Carme Chacón Piqueras, el jefe del Estado Mayor de la Defensa, general del aire José Julio Rodríguez Fernández, y el almirante jefe del Estado Mayor de la Armada, almirante general Manuel Rebollo García. Seguidamente, Sus Majestades fueron saludados por el almirante jefe de Personal de la Armada, almirante José Francisco Palomino Ulla, el general jefe de la Fuerza Logística Operativa, general de división Jesús Guerrero Chacón, y el comandante-director de la Escuela Naval Militar, capitán de navío José Luis Urcelay Verdugo.
Tras los honores de ordenanza, Don Juan Carlos pasó revista al Batallón de Alumnos. A su término, los Reyes fueron saludados por la presidenta del Parlamento de Galicia, Pilar Rojo Noguera, el delegado del Gobierno en la Comunidad Autónoma de Galicia, Antón Louro Goyanes, el alcalde de Marín, Francisco Andrés Veiga Soto, el director del Gabinete de la ministra de Defensa, Manuel López Blázquez, el director del Gabinete Técnico de la ministra de Defensa, vicealmirante Javier Pery Paredes, el director general de Comunicación de la Defensa, Sergio Sánchez Benitez, el director general de Asuntos Económicos del Ministerio de Defensa, Mariano Rojo Pérez, el arzobispo castrense en España, monseñor Juan del Río Martín, el director general de Reclutamiento y Enseñanza Militar, Javier García Fernández, el director de Enseñanza Naval, contralmirante Francisco José Cortes Uría, el director del Centro Universitario de la Defensa de la Escuela Naval Militar, José María Pousada Carballo, el suboficial mayor de la Armada, Manuel García Delgado, y el suboficial mayor de la Escuela Naval Militar, Antonio Romero Hidalgo.
A continuación, Don Juan Carlos y Doña Sofía ocuparon su lugar al lado derecho del altar. Después del traslado de la Bandera a la Presidencia y el Homenaje a los que dieron su vida por España, Sus Majestades se trasladaron a la Tribuna y comenzó la Jura de Bandera.
Una vez concluida, el Rey condecoró y entregó sus despachos a los oficiales número uno de las distintas promociones: alférez de navío del Cuerpo General de la Escala Superior Mario Belizón Melero, teniente de Infantería de Marina de la Escala Superior Carlos Morillo Martín, alférez de fragata del Cuerpo General de la Escala de Oficiales Alejandro Bollo Vázquez, alférez de Infantería de Marina de la Escala de Oficiales Francisco J. Campaña Moreno y alférez de fragata del Cuerpo de Especialistas Carlos Peña Rivera. Seguidamente, comenzó la entrega de Reales Despachos al resto de los oficiales de la 409ª Promoción del Cuerpo General, la 139ª Promoción de Infantería de Marina, la 84ª Promoción de Intendencia, la 19ª Promoción de Ingenieros de la Armada, la 13ª Promoción de Ingenieros de la Armada, la 17ª Promoción del Cuerpo General, la 18ª Promoción de Infantería de Marina, la 18ª Promoción del Cuerpo de Especialistas, militares de Complemento del Cuerpo General, de Infantería de Marina, del Cuerpo de Intendencia, del Cuerpo de Ingenieros, del Cuerpo de Especialistas y de Cuerpos Comunes de las Fuerzas Armadas, pertenecientes al Cuerpo Jurídico Militar, al Cuerpo Militar de Intervención y al Cuerpo Militar de Sanidad.
Posteriormente, el presidente de la Xunta de Galicia hizo entrega de un sable al alférez de navío Mario Belizón Melero, como número uno de la Promoción del Cuerpo General de la Escala Superior de Oficiales. Tras el desfile de los nuevos oficiales bajo la Bandera, el comandante-director del Centro pronunció unas palabras, que dieron paso a la interpretación del Himno de la Armada y a una parada militar.
Sus Majestades los Reyes se dirigieron al Casino de Alumnos "Almirante Bonifaz", donde firmaron en el Libro de Honor y se reunieron brevemente con los nuevos oficiales. Seguidamente, se trasladaron al Patio de Aulas "D.Álvaro de Bazán", donde se sirvió un Vino de Honor, cuyo brindis corrió a cargo de la ministra de Defensa. Una vez finalizados los actos, Don Juan Carlos y Doña Sofía fueron despedidos por las mismas autoridades que les recibieron a su llegada.