Su Majestad la Reina pronunció unas palabras en las que agradeció la oportunidad de “compartir una tarde en la que celebramos la emoción de la lectura y el poder reparador de un buen libro, sobre todo después de estos 14 meses de pandemia”, y felicitó a las premiadas como autoras de “dos historias sin nada en común, en apariencia, pero con una gran sintonía en sus valores: la diversidad, la búsqueda de la identidad, la certeza de que vivimos en comunidad y todos contamos, la importancia de los afectos, la tradición oral, la necesidad innegociable de valorar y cuidar los entornos naturales y la deuda de respeto y cariño que tenemos con nuestros mayores”.
“Insisto cada año y van unos cuantos: no hace falta tener 9 años o 17 para leer estas novelas. Les invito por tanto a compartir con Beatriz y con Chiki los pensamientos y las decisiones que toman la joven Nadia y el abuelo Leocadio. Los dos tienen el valor, la iniciativa y la fuerza de transformar su entorno. Y eso lo cambia todo”, dijo Doña Letizia, quien subrayó que “por muchas vueltas que demos y por mucho que buceemos en tesis doctorales, estadísticas oficiales, artículos científicos y periodísticos, conferencias magistrales… no hay grieta en esta verdad inapelable: leer sólo nos reporta beneficio. Y en estos tiempos en los que la pelea por ganar la atención de los más jóvenes se recrudece, parar, sentarse y abrir un libro (¡y leerlo!) es garantía de concentración, profundización y comprensión. Pensar antes de hablar y leer antes de pensar, que dice Fran Lebowitz”.
Su Majestad la Reina concluyó sus palabras “con un agradecimiento que extiendo a todas las personas que durante estos meses de pandemia habéis contribuido a que nos sintamos mejor gracias a los libros: editores, autores, ilustradores, libreros, a todos los que trabajáis en la industria cultural del libro”.