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uy buenos días a todos y felicidades por esta celebración.Hoy, tras casi 10 años, tengo la enorme alegría de regresar a este Centro de Formación del CNP en Ávila. Entonces, como también en esta ocasión, el motivo de la visita era la de, como Heredero de la Corona, ser testigo de vuestra jura o promesa y presidir la entrega de títulos a la promoción correspondiente. Por tanto, gracias al Ministerio del Interior, al Cuerpo Nacional de Policía y a este Centro por darme esta nueva oportunidad de visitaros y de dirigiros unas palabras.En ellas quiero que sobre todo prevalezcan la alegría por encontrarme de nuevo entre vosotros, los policías de España, y el reconocimiento que la Corona siente por lo que representan de servicio a la sociedad española las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad: por la Policía y por la Guardia Civil.Hoy quiero celebrar con vosotros la incorporación a la actividad policial de 2.031 nuevos Policías, de los que, cabe destacar, 326 son mujeres.Por ello deseo felicitar de corazón a quienes en este día os incorporáis al Cuerpo Nacional de Policía. Me constan los esfuerzos que habéis tenido que realizar a lo largo de vuestra formación, durante los procesos selectivos y en los períodos académicos y de prácticas, que habéis logrado completar con éxito. Recibid mi más cordial enhorabuena.Felicito también a todos vuestros familiares, algunos de los cuales nos acompañan en este acto. Con su comprensión, apoyo y sacrificio, han contribuido también a hacer posible este momento.Tras culminar vuestro periodo de formación, en los próximos días vais a incorporaros a vuestros nuevos destinos, en donde desempeñaréis las funciones propias de vuestra categoría profesional. Así vuestro trabajo se sumará al esfuerzo de garantizar a todos los ciudadanos una convivencia pacífica y el ejercicio de sus derechos en libertad, que tanto os identifica a los que tenéis el orgullo de ser policías.La profesión policial conlleva sacrificios y un continuo espíritu de servicio, una vocación dirigida a garantizar la seguridad de los hombres y las mujeres de España, para que puedan ejercer libremente y en paz sus derechos y libertades como ciudadanos. Vuestra actuación implica, por lo tanto, la defensa de los valores democráticos y del Estado de Derecho. Esto es lo que España y los españoles esperan de vosotros.Desde aquí, os animo a que prestéis siempre vuestro servicio con la mayor profesionalidad y de acuerdo con los principios éticos y deontológicos en los que se basa el Cuerpo Nacional de Policía para realizar la misión que le encomienda nuestra Constitución y las funciones que le atribuyen nuestras Leyes.La preparación adquirida y vuestra actitud os auguran éxitos en estas nuevas responsabilidades.El Cuerpo Nacional de Policía apuesta por realizar sus actividades conforme a parámetros de eficacia, de eficiencia técnica y profesional, en definitiva, en términos de calidad.Todo ello no sería posible sin las medidas necesarias, entre las que se incluyen, por una parte, la descentralización y acomodación de las Unidades policiales a las demandas reales de la sociedad en materia de seguridad pública. Y, por otra, la mejora en la formación de los funcionarios policiales.Buena formación y capacitación profesional, que justifican estas nuevas instalaciones que, además de mejorar la calidad de vuestra preparación profesional, permiten dar cabida al incremento del número de policías que la sociedad española demanda. Quiero destacar que el Centro de Formación en el que nos encontramos es una verdadera referencia en el campo de la capacitación policial y además es ya muy conocido y admirado por los cuerpos policiales de tantos otros países.Esperamos mucho de vosotros, nuevos policías. Esperamos profesionalidad y entrega. Sabemos que vais a estar cerca de los ciudadanos y de sus problemas, en definitiva, que vais a estar cumpliendo con vuestra misión de proteger la vida pacífica y cotidiana de los españoles, y de aquellos que nos visitan o viven entre nosotros. Una misión que merece nuestro agradecimiento y el de todos nuestros compatriotas.Como ya dije en 1997 en este mismo Centro, andldquo;si estáis a la altura de las exigencias que el Estado social y democrático de Derecho demanda de la función policial, recibiréis a cambio la mejor recompensa que todo servidor público puede desear: la gratitud y el respeto de la sociedad.andrdquo;Quiero terminar mis palabras rindiendo un emocionado homenaje a todos los miembros del Cuerpo Nacional de Policía que han perdido su vida en defensa de la ley y de la seguridad y los derechos de los españoles. Su entrega sin límites y su recuerdo permanecerá siempre en nuestra memoria. Su ejemplo será un acicate permanente para todos.Os reitero mi felicitación por el compromiso que habéis asumido en el día de hoy, desde el convencimiento de que la ilusión que habéis puesto de manifiesto seguirá alentando vuestra trayectoria profesional que, por nuestro bien y el de todos, os deseo llena de éxitos.Enhorabuena a todos.