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© Casa de S.M. el Rey Su Majestad el Rey, a su llegada, con el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, y el presidente de la Generalitat de Cataluña
Palacio de Congresos de Cataluña. Barcelona, 23.07.2015
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© Casa de S.M. el Rey Don Felipe recibe el saludo de la alcaldesa de Barcelona, en presencia del ministro de Justicia, la delegada del Gobierno en la Comunidad Autónoma de Cataluña y la fiscal general del Estado
Palacio de Congresos de Cataluña. Barcelona, 23.07.2015
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© Casa de S.M. el Rey Vista de la mesa presidencial durante el acto
Palacio de Congresos de Cataluña. Barcelona, 23.07.2015
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© Casa de S.M. el Rey Su Majestad el Rey entrega su despacho a la número uno de la LXV Promoción de la Carrera Judicial, Elena Gutiérrez
Palacio de Congresos de Cataluña. Barcelona, 23.07.2015
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© Casa de S.M. el Rey Don Felipe y el resto de componentes de la mesa presidencial entregan los despachos a los nuevos jueces
Palacio de Congresos de Cataluña. Barcelona, 23.07.2015
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© Casa de S.M. el Rey Su Majestad el Rey, durante su discurso
Palacio de Congresos de Cataluña. Barcelona, 23.07.2015
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© Casa de S.M. el Rey Vista del auditorio durante la intervención de Su Majestad el Rey
Palacio de Congresos de Cataluña. Barcelona, 23.07.2015
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© Casa de S.M. el Rey Su Majestad el Rey y el resto de autoridades asistentes, con los nuevos jueces
Palacio de Congresos de Cataluña. Barcelona, 23.07.2015
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© Casa de S.M. el Rey Su Majestad el Rey y el resto de autoridades asistentes, con los nuevos jueces
Palacio de Congresos de Cataluña. Barcelona, 23.07.2015
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© Casa de S.M. el Rey Don Felipe conversa con los nuevos jueces
Palacio de Congresos de Cataluña. Barcelona, 23.07.2015
En su intervención, Su Majestad el Rey puso de relieve que, tanto para el Poder Judicial como para el resto de las instituciones del Estado, "el respeto a la ley nunca ha sido -ni es ni debe ser- un simple trámite, una mera formalidad; una alternativa. En su raíz más profunda, respetar la ley es la fuente de legitimidad y la exigencia ineludible para una convivencia democrática en paz y libertad".
Don Felipe recordó a los nuevos jueces que, en el ejercicio de su función jurisdiccional, tienen "la gran responsabilidad de velar por la observancia del Estado de Derecho". "Responsabilidad que compartís con las demás instituciones, cada una dentro de sus respectivas competencias. Formar parte de esas instituciones es un inmenso privilegio pero también comporta una gran deber: el del compromiso cívico y moral con los ciudadanos y con nuestro País", agregó.
"Vais a tener así el honor, pero sobre todo la inmensa responsabilidad, de participar en una tarea que es esencial para la convivencia pacífica de los ciudadanos, y de ser los actores principales en la justa y ordenada resolución de conflictos. En ese recorrido deberán acompañaros siempre la sabiduría, el talento y la prudencia; la serenidad, la templanza y la mesura; la integridad, la honestidad y la imparcialidad. Virtudes, valores y principios que no debéis olvidar ni comprometer, como referentes que seréis para los ciudadanos", señaló el Rey a los nuevos jueces.
"A partir de hoy os integráis, como he subrayado, en una de las columnas vertebrales del Estado y, de esa manera, tenéis también, junto a sus demás Poderes e Instituciones, la obligación de preservar ese Estado Social y Democrático de Derecho con el que nuestra Constitución comienza sus primeras palabras. Su conquista ha sido una aspiración larga y legítimamente sentida y deseada por todos y su plena vigencia es imprescindible para el funcionamiento de nuestra comunidad política y para nuestro desarrollo económico y social. Porque a través del Estado de Derecho, los ciudadanos encuentran la garantía de sus libertades ante los Poderes Públicos. Porque los Poderes Públicos, de esa manera, se ven sometidos al imperio de la ley y, respetándola, garantizan el ordenado funcionamiento del Estado", añadió Don Felipe.
Don Felipe estuvo acompañado por el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial, Carlos Lesmes; el presidente de la Generalitat de Cataluña, Artur Mas; el ministro de Justicia, Rafael Catalá; la delegada del Gobierno en la Comunidad Autónoma de Cataluña, María de los Llanos de Luna; la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau; la fiscal general del Estado, Consuelo Madrigal; la secretaria de Estado de Justicia, Carmen Sánchez-Cortés; el inspector general del Ejército de Tierra, Ricardo Álvarez-Espejo; el vicepresidente del Tribunal Supremo, Ángel Juanes, y el consejero de Justicia de la Generalitat de Cataluña, Germà Gordó, entre otras autoridades.
El acto comenzó con las intervenciones de la directora de la Escuela Judicial, Gema Espìnosa, y el presidente del Tribunal Supremo y del Consejo General del Poder Judicial. Tras dar lectura el secretario general del Consejo General del Poder Judicial, Joaquín Vives de la Cortada, a los nombramientos, Su Majestad el Rey entregó el Despacho y la Cruz de San Raimundo de Peñafort a Elena Gutiérrez, número uno de la Promoción. A continuación, el resto de jueces de la LXV recibieron sus Despachos de manos de las autoridades asistentes. El discurso de Su Majestad el Rey puso fin a la ceremonia.
El sistema básico de ingreso en la Carrera Judicial es el concurso-oposición, seguido por un curso teórico y práctico de selección realizado en la Escuela Judicial. Es posible además el acceso directo a la categoría de magistrado entre juristas de reconocida competencia con más de diez años de ejercicio profesional.
La Escuela Judicial fue refundada por el Consejo General del Poder Judicial en 1997, tras haber asumido dicho órgano plenas competencias en materia de selección y formación de jueces. El sistema tradicional de acceso a la carrera judicial, mediante la oposición, garantiza que el futuro juez ha adquirido los conocimientos jurídicos precisos para el ejercicio de la función jurisdiccional, cumpliendo los principios de mérito, capacidad e independencia.