Quero comezar as miñas palabras, como fixen esta mañá, manifestando a miña alegría por estar de novo en Galicia, agora na querida cidade de Vigo que nos acolle igualmente con tanta hospitalidade.
Moitas grazas por iso e sobre todo agora grazas especialmente por esta Medalla de Ouro da Confederación de Empresarios de Pontevedra que tivestes a xentileza de entregarme; e también por invitarme a asistir a este xantar que me da a oportunidade de coñecer mellor o extraordinario labor da vosa organización. Esta Confederación é un magnífico expoñente do dinamismo e do carácter emprendedor da provincia de Pontevedra. Parabéns de corazón.
La CEP ha dado, a lo largo de su historia, numerosas muestras de su compromiso con el bienestar de los ciudadanos pontevedreses y gallegos a través del mejor servicio al empresariado de la provincia, favoreciendo el crecimiento económico, la superación de la crisis y la generación de empleo.
"...creo, que somos −o que tenemos− mucho más país de lo que muchas veces pensamos; que, a pesar de las dificultades, España cuenta con grandes fortalezas y grandes activos que nos deben permitir mirar al futuro con esperanza; que en estos tiempos todavía difíciles debemos extremar nuestro sentido del deber, de la responsabilidad y, en definitiva, dar lo mejor de nosotros mismos..."
En este sentido, ha promovido el asociacionismo empresarial y la colaboración entre las empresas y los centros tecnológicos y universitarios; ha impulsado con gran visión la internacionalización en muchos países del mundo; y ha fomentado, asimismo, la cooperación transfronteriza con Portugal, lo que contribuye de forma evidente y muy importante a estrechar aún más nuestros lazos con este país hermano.
En suma, en la CEP habéis sabido cumplir con eficacia y buen hacer las misiones que vosotros mismos os habéis encomendado, en bien de los empresarios pontevedreses y de todos vuestros conciudadanos. Os doy de nuevo la enhorabuena por ello y os invito a que sigáis, como siempre, realizando vuestro trabajo, tan digno de reconocimiento.
Y termino mis palabras diciendo, porque así lo creo, que somos −o que tenemos− mucho más país de lo que muchas veces pensamos; que, a pesar de las dificultades, España cuenta con grandes fortalezas y grandes activos que nos deben permitir mirar al futuro con esperanza; que en estos tiempos todavía difíciles debemos extremar nuestro sentido del deber, de la responsabilidad y, en definitiva, dar lo mejor de nosotros mismos.
Así creo que lo estáis haciendo vosotros aquí y os felicito por ello. También os animo a continuar con vuestro esfuerzo en beneficio de todos, especialmente de quienes más están sufriendo en las actuales circunstancias que vive nuestra sociedad. Porque será con vuestro empuje, con vuestro impulso, con vuestra iniciativa, como realmente se lograrán generar puestos de trabajo y un mayor bienestar para todos. Y porque así podremos conseguir salir de esta crisis con una España más fortalecida, con una economía más equilibrada, más internacionalizada y más sostenible.
Muchas gracias.