Me alegro mucho de reencontrarme hoy con todos vosotros en esta cita anual de tanto interés para nuestra cooperación internacional al desarrollo.
CODESPA, desde su nacimiento a mediados de los años ochenta, ha hecho posible que sean cada vez más las personas que se benefician de sus programas con el objetivo de proporcionarles oportunidades para desarrollar sus capacidades, contribuyendo de este modo a un mundo más justo y equitativo. Es un orgullo formar parte de esta organización, de esta iniciativa y participar apoyando su labor, sus proyectos, sus objetivos desde hace casi veinte años, en mi caso.
De hecho CODESPA fue pionera en su apuesta por lo que hoy llamamos Responsabilidad Social Corporativa. La promoción del respeto, el diálogo y la solidaridad buscando una relación equilibrada y armoniosa entre los intereses comerciales y las necesidades sociales prioritarias de los países menos desarrollados, en un marco de lucha contra la pobreza, supone un gran avance en la evolución de las relaciones entre Empresa y Sociedad.
En este sentido, la sensibilización y la búsqueda de apoyo de los principales agentes económicos y sociales es un reto constante al que no podemos ni debemos renunciar para favorecer así que las comunidades menos prósperas se apropien de su destino y se conviertan en protagonistas de su progreso. Vuestro esfuerzo altruista y vuestra entrega, iniciativa y profesionalidad son cualidades de gran valor para poder lograrlo.
Nuevamente es un honor para mí entregar estos Premios que llegan hoy a la decimosexta edición y que se mantienen fieles a su objetivo principal y original de detectar, estimular y potenciar aquellas iniciativas que buscan dar respuestas eficaces a los problemas que padecen las personas y colectivos más vulnerables de la sociedad.
"...En este sentido, la sensibilización y la búsqueda de apoyo de los principales agentes económicos y sociales es un reto constante al que no podemos ni debemos renunciar para favorecer así que las comunidades menos prósperas se apropien de su destino y se conviertan en protagonistas de su progreso..."
En la variedad de proyectos que, año tras año, se presentan a los Premios CODESPA podemos comprobar cómo las empresas tienen diferentes maneras de generar oportunidades: impulsando negocios inclusivos, transfiriendo conocimiento o implicando a sus trabajadores en proyectos sociales, entre otros. Los candidatos de esta edición son un claro ejemplo de que se puede operar en los países en desarrollo con motivaciones ligadas no sólo a beneficios económicos, sino también al bienestar de las poblaciones con las que trabajan.
Por otro lado, las empresas, los grupos de personas y los medios de comunicación son herramientas muy relevantes en el fomento de valores como la solidaridad, el compromiso con los más necesitados, y el respeto por otras culturas y pueblos. Es un deber reconocer el trabajo de todos los que, en esa dirección, apuestan por sensibilizar a la población española desde su ámbito profesional.
Y ahora quiero felicitar a los ganadores de este año: Como acabamos de ver, Prosegur lo ha sido por su proyecto “Piecitos colorados”, con el que ha conseguido mejorar la educación integral y la calidad de vida de niños que viven en zonas desfavorecidas de Iberoamérica. Expert-timing ha recibido el galardón por su proyecto a través de su Fundación, Investigación y Cooperación que tiene por objetivo desarrollar un programa integral de microfinanzas que contribuye, de forma clara y sostenible, a mejorar el nivel de vida de las familias beneficiarias en Lima, Perú. También se ha reconocido la labor de IBM por implicar a sus empleados en disminuir la brecha digital existente a través de la formación en nuevas tecnologías y de la donación, instalación y mantenimiento de equipos y redes informáticas. Asimismo, el reconocimiento a Purificación Gómez se debe a su reportaje “El lado menudo de la inmigración”, a través del cual nos muestra la importancia de la sensibilización como herramienta para avanzar hacia un mundo más justo.
A todos ellos, pues, así como a los finalistas y a quienes han presentado sus propuestas, mi enhorabuena más sincera y toda mi admiración por sus iniciativas y por el espíritu que las motiva. Quiero también dar las gracias a las Administraciones Públicas, a las empresas, a los periodistas y a los ciudadanos que, con su generosidad y esfuerzo consiguen que, cada día, estos proyectos avancen por el camino adecuado. Todos ellos hacen realidad que personas concretas –con nombres y apellidos- cuenten ahora con nuevas oportunidades, con la posibilidad de alcanzar un futuro mejor.
La labor de elegir a los finalistas en unos Premios como estos nunca es fácil; por ello, doy las gracias muy en particular a los miembros del jurado por abordar su tarea con rigor, ilusión y de una forma desinteresada.
Y termino felicitando igualmente a todo el equipo de CODESPA por la ilusión que pone en cada proyecto y por continuar impulsando el desarrollo de las comunidades más vulnerables y de aquellos que más lo necesitan. Os animo a que sigáis trabajando, desde la humildad pero con convicción, con determinación y con la esperanza siempre de conseguir el mayor impacto económico y social al menor coste posible, a través de alianzas con los diferentes sectores y los principales agentes de la sociedad, tanto públicos como privados. Solo así podremos alcanzar nuestra meta, manteniendo el compromiso con los Objetivos para el Desarrollo del Milenio y logrando la sostenibilidad y el bienestar de las comunidades más desfavorecidas.
Y os agradezco la presentación hoy de varios de vuestros proyectos, además del expuesto aquí en el Congo. Un conjunto de acciones con impacto real, con visión e implementación moderna y permanentemente alerta a las nuevas tendencias y a las sensibilidades para lograr mejores resultados. Innovando y adaptándose a las circunstancias locales pero extrapolando enseñanzas replicables en otros lugares.
Gracias, enhorabuena y feliz Navidad a todos.