S
eñor Presidente,
En primer lugar, deseo daros, junto a Vuestra esposa y a la delegación que os acompaña, nuestra más cordial bienvenida a España. Es para mí una satisfacción recibiros para ahondar en las relaciones de amistad que existen entre nuestros dos pueblos.
Estoy convencido de que Vuestra visita permitirá impulsar nuestra cooperación bilateral, ampliándola a nuevos ámbitos. Senegal y España son dos países que comparten valores e intereses comunes, y mantienen estrechas relaciones de concertación y diálogo que ya abarcan desde el ámbito político al económico, además de la cooperación al desarrollo.
Senegal representa un modelo de desarrollo en África Occidental. Un modelo que ha sabido combinar la tradición africana con los principios de la democracia y el Estado de Derecho. Fruto de esa tolerancia es la estabilidad social que caracteriza a Vuestro país, en donde conviven gentes pertenecientes a diferentes etnias y confesiones religiosas. A España llegan también ecos de la vitalidad de la cultura senegalesa.
El dinamismo de los senegaleses y de sus instituciones ha permitido, a lo largo de los últimos años, un crecimiento sostenido, convirtiendo a Senegal en un país cada vez más atractivo desde el punto de vista económico. Sectores como el turismo, la pesca o el comercio ofrecen oportunidades de gran interés para nuestras empresas respectivas.
Señor Presidente,
España está comprometida con el desarrollo de Senegal, que ostenta la consideración de país prioritario para la cooperación española.
Nos complace comprobar que existe una gran receptividad y aprovechamiento por parte de Vuestro país de los programas conjuntos de colaboración en sectores de especial trascendencia, como la pesca, que reviste una gran importancia para la economía de nuestros dos países, o la salud y la educación, que pretenden mejorar las capacidades y condiciones de vida de los sectores de población más vulnerables.
Una cooperación bilateral que viene desarrollándose con éxito reciente desde España en general, y con ciertas Comunidades Autónomas en particular, entre las que destaca, sin duda, Canarias.
No quisiera pasar por alto la oportunidad de transmitiros nuestro apoyo por la catástrofe de la plaga de la langosta, que recientemente se ha abatido sobre Senegal y otros países de la región, llegando incluso a afectar de forma limitada a la Comunidad Autónoma de Canarias. Como país amigo, nos hemos querido solidarizar con los senegaleses aportando nuestra ayuda, tanto bilateral como en el marco de la iniciativa de Argel, para paliar los cuantiosos daños sufridos.
Señor Presidente,
España es consciente del empeño y liderazgo de Senegal en la mejora de la situación del Continente africano y la resolución de conflictos. Creemos que una de las claves del desarrollo de África es el impulso a las organizaciones de integración regional.
La Comunidad Económica de Estados de África Occidental constituye un ejemplo palpable de cómo una organización de Estados puede aunar esfuerzos, no sólo para conseguir un crecimiento económico en África, sino también para gestionar crisis y prevenir conflictos. Por ello, quiero transmitirle nuestro apoyo firme en la labor que Senegal está desempeñando dentro de esa organización.
Más allá del ámbito estrictamente regional, no quiero dejar de mencionar la Unión Africana y la Nueva Asociación para el Desarrollo en África. Sabemos, Señor Presidente, que ha sabido impulsar esta última iniciativa desde el primer momento, consciente de la importancia de que sean los propios africanos los que propongan soluciones a los problemas que afronta el Continente.
Por último, y en tanto que Miembros de una comunidad internacional cada vez más global, me gustaría referirme a aquellos retos a los que hemos de enfrentarnos conjuntamente, y para los que también hemos de coordinar nuestros esfuerzos.
La lucha contra el terrorismo, el tráfico ilegal de seres humanos o la conservación del medio ambiente, son cuestiones que nos afectan a todos, y que sólo podremos resolver trabajando de forma coordinada y aportando soluciones imaginativas.
Permítame concluir mis palabras levantando mi copa, para brindar por Vuestra Excelencia y por Vuestra esposa, por un futuro cada vez más próspero para Senegal y por el buen entendimiento y la amistad entre nuestros dos Estados.