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uenos días a todos y gracias por vuestra invitación para sumarnos y presidir este acto que gira en torno a un concepto fundamental de la mejor cultura empresarial de nuestros días. Me refiero a la Responsabilidad Social de la Empresa, que tiene en la Fundación SERES (Sociedad y Empresa Responsable) un nuevo valedor en España, cuya juventud quizá no haga justicia a la gran experiencia que integra su Patronato y su equipo, experiencia que conozco bien, en el mundo de la acción social desde la empresa.
Antes de esta ceremonia de entrega hemos tenido la oportunidad de mantener con su Comité Ejecutivo una reunión de trabajo de gran interés para conocer con mayor detalle sus objetivos. Gracias por contarnos lo que os proponéis y por transmitirnos ese espíritu de generosidad que orientáis con inteligencia, pragmatismo y sentido común para lograr una mejora palpable en los entornos sociales y económicos en los que opera cualquier empresa y en la sociedad en general. Mejora que, sin duda, también incidirá en los resultados de la propia empresa, en el aprecio y prestigio que reciba de la sociedad y en la satisfacción de sus empleados y clientes.
Sabemos que la Responsabilidad Social Empresarial -RSE- surge del convencimiento profundo de que la empresa debe hacer patente su sensibilidad hacia los problemas que vive la sociedad, pues forma parte intrínseca de ella y tiene una indudable responsabilidad con sus retos y dificultades, tanto presentes como de futuro.
Hoy la Responsabilidad Social debemos entenderla en un sentido amplio que abarque desde las políticas de recursos humanos, hasta todo lo relacionado con el necesario respeto al medio ambiente. Se dice con razón que la auténtica Responsabilidad Social de la Empresa se manifiesta tanto en sus relaciones con los trabajadores, los clientes y los proveedores, como con las Administraciones públicas o las distintas entidades sociales. Es por lo tanto un concepto multidisciplinario que acompaña el desarrollo de las compañías más avanzadas y comprometidas con el bienestar económico y social allí donde operan.
España ha vivido en losúltimos años un importante desarrollo de la RSE que no solo debemos conservar, sino que hemos de seguir alentando, conscientes de que no se trata de un coste, sino de una valiosa inversión social para las compañías del siglo XXI.
De ahí que queramos felicitar a la Fundación SERES por haber instituido estos Premios destinados a identificar, promover y reconocer públicamente actuaciones sociales estratégicas e innovadoras por parte de nuestras empresas, que generen valor añadido para el conjunto de la sociedad y para ellas mismas.
Enhorabuena por esta iniciativa a quienes integráis la Fundación, y nuestra felicitación más cordial a las cinco empresas hoy premiadas por sus programas y proyectos, sin duda modélicos, en elámbito de la Responsabilidad Social, como bien ha quedado reflejado en el Acta del Jurado y en los vídeos proyectados realmente llenos de dignidad, emoción y eficacia. Mil enhorabuenas pues al Grupo Norte, al Grupo Siro, a DKV Seguros, a NH Hoteles y a MRW. Gracias asimismo al Jurado por su labor rigurosa y difícil.
Los galardones que hemos entregado distinguen en concreto actuaciones dirigidas a colectivos en riesgo de exclusión, que sufren dificultades de inserción laboral o que son objeto de discriminación para obtener un trabajo digno. Actuaciones que aseguran también el acceso de los discapacitados al empleo o que apoyan las necesidades de alojamiento de familiares con hijos enfermos.
Por cierto, creo importante destacar algo que nos ha contado el Presidente Juan Arena en la reunión: que todas estas empresas no han abandonado ni reducido sus programas de acción social por la crisis.
Todos esas actuaciones de las empresas premiadas son magníficos ejemplos de los mensajes que queréis transmitir y de las orientaciones que queréis promocionar. Como he dicho en otras ocasiones, hoy más que nunca es preciso perseverar en el compromiso social a favor de las poblaciones más desfavorecidas, que son quienes sufren las consecuencias más graves de las dificultades por las que atravesamos.
Señoras y señores, en definitiva, SERES merece toda nuestra gratitud al fomentar, con estos galardones, programas con valor social al tiempo que empresarial, que sean estratégicos, sostenibles y dignos de emulación, así como que ayuden a anticipar soluciones a problemas o situaciones desfavorables. Algo especialmente valioso en períodos de crisis económica como el actual.
Felicidades nuevamente a los Premiados por ser ejemplo de excelencia empresarial al servicio del mayor progreso económico y social de nuestro país.
Estamos seguros de que suséxitos y experiencias novedosas servirán de modelo para muchas acciones de Responsabilidad Social que generen y alienten en toda España una cultura empresarial aún más dinámica, rica y comprometida con su entorno.
Muchas gracias.
Un mensaje final: ayudemos a hacer de España una nación líder en generación valores.