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xcmo. Señor Presidente de la Diputación General de AragónExcmo. Delegado del GobiernoSeñor Alcalde y Corporación MunicipalSeñoras y Señores
Muchas gracias, señor Alcalde, por sus palabras de bienvenida, y a los oscenses por su cordial recibimiento, al que respondo expresándoles mi satisfacción por encontrarme aquí y con ellos.
El noble escenario en que nos hallamos ilustra fielmente la semblanza de esta Ciudad, que fue capital de Aragón y sede de sus Cortes, y que guarda los sepulcros de los Reyes que proyectaron con fuerza a este Reino hacia la Historia grande de España.
Comparto la grandeza de vuestro pasado, pero me importa aún más vuestro presente, y la resolución con que os disponéis a vivirlo para así afrontar el futuro en las mejores condiciones.
Podéis contar conmigo en este camino. Huesca creció al calor el esfuerzo de sus hombres, que lucharon durante siglos por engrandecerla. Hoy se trata de reeditar con aire nuevo este compromiso, y desplegar todas sus posibilidades.
Este es precisamente el motivo de mi visita. Vengo a conocer de primera mano y en detalle vuestros proyectos, los medios con que contáis y las ayudas que vais a movilizar para encauzarlos y realizarlos.
Os adelanto mi confianza en el éxito de vuestros planes, que lo merecen por su coherencia y realismo, pues se basan en coordenadas tan evidentes como vuestro emplazamiento, en el cruce de caminos que unen a España con Europa, y en el punto de encuentro del llano y la montaña, que también justifica vuestra preocupación por un recurso tan vital para vuestro desarrollo como es el agua.
Y os felicito, sobre todo, por la importancia que reserváis, en este proceso, a una adecuada formación de la juventud, con la convicción, que comparto plenamente, de que el progreso y el bienestar colectivo depende en primer lugar y exige, por tanto, contar con profesionales bien preparados y dispuestos a ejercer generosamente sus responsabilidades hacia el conjunto de la sociedad.
Os animo, finalmente, a avanzar juntos, codo con codo, hacia vuestras metas. Me consta que este espíritu os anima desde antiguo, y sigue vivo entre vosotros. Es hora de escribir con ilusión una página nueva de esta historia de convivencia y de concordia, con las que cuanto se alcanza es de todos y para todos.
Acepto, señor Alcalde, su invitación al mutuo conocimiento. Y desde este instante sumo mi voz a vuestra confianza en el progreso, a esa voz de resonancia histórica y timbre de futuro que todos escucharán sin duda. A esa voz que constituye, señoras y señores, la nueva Campana de Huesca.